PARAGUAY: GOLPE DE ESTADO EXPRÉS

Golpe de Estado exprés

Artículos de Opinión

Alfredo García
25-06-2012




La ultraderecha paraguaya reeditó el golpe de Estado que derrocó al presidente hondureño Manuel Zelaya el 28 de junio de 2009, utilizando un “atajo legal” a través del Congreso y la Corte Suprema de Justicia.



El mandatario paraguayo, Fernando Lugo, denunció que se enfrenta a un “golpe de Estado exprés”, después que el Congreso aprobó el jueves iniciarle un “juicio político sin ningún argumento válido” y dictar sentencia al día siguiente.



Con el pretexto de un cruento choque entre policías y campesinos el pasado 15 de junio, con un saldo de 17 muertos, la Cámara de Diputados en apenas cinco horas y por abrumadora mayoría, aprobó un “juicio político” contra el presidente Lugo, responsabilizándolo por los sangrientos sucesos.



Lugo advirtió sobre indicios que señalan al precandidato del Partido Colorado, Horacio Cartes, estar detrás de la conspiración anticonstitucional.



“Hay un enfoque muy fuerte, con indicios bastantes claros, de que quien está detrás de todo esto es el precandidato del Partido Colorado. Cartes sabe que su candidatura no está prendiendo, no está creciendo y la única manera que pueda crecer su candidatura es eliminando a los candidatos y al proceso democrático iniciado en el 2008 por Fernando Lugo”, puntualizó el mandatario.



Cartes es dueño de una inmensa fortuna que incluye bancos, haciendas ganaderas, tabaqueras y una embotelladora de refrescos. Fue habilitado para competir por la candidatura presidencial en 2013, en una cuestionada convención “colorada” realizada en enero.



A finales del pasado año, un informe filtrado por WikiLeaks, lo acusó de estar vinculado al ex presidente del Banco Central, Gabriel González, en actividades de lavado de dinero.



Por su parte Emilio Camacho, defensor del presidente, declaró que la sentencia contra Lugo ya estaba decidida. “El pueblo paraguayo tiene que saber que está dictada la sentencia al presidente Fernando Lugo”, expresó Camacho en su defensa ante la Cámara de Senadores. “Esto quedará en la historia de cómo se liquida a un ser humano antes de escucharlo”, manifestó Camacho, tras denunciar la violación del principio de juicio previo garantizado en la Constitución Nacional.



Camacho también sugirió que la masacre en la hacienda que dejó 5 policías y 11 campesinos muertos, fue una deliberada provocación contra el presidente. “Esos fiscales ejecutaron todo lo contrario, convirtieron una orden de detención en desalojo. Ordenaron un cateo y requisa, eso fue comunicado a la Corte y al Fiscal General, pero nadie investigó ni va a investigar jamás”, denunció Camacho.



El presidente paraguayo señaló como responsables de la crisis que enfrenta a los que “no desean el cambio en Paraguay y los que creen que hay que eliminar este proceso democrático iniciado en el 2008, los que se han beneficiado durante años y décadas de los bienes del Estado, los que han vivido privilegiadamente en los últimos años y (...) ellos están detrás de este golpe de Estado parlamentario, en el juicio político contra el presidente Lugo”, afirmó.



A un año de las elecciones presidenciales y tras exitosa gestión presidencial, la clase política de centro-derecha que apoyó la elección de Lugo lo traiciona, atemorizada por el precedente integracionista y antiimperialista sudamericano. El presidente queda sin apoyo de los partidos tradicionales, pero con el respaldo de la mayoría de la población, que es quien ejerce el poder del voto.